Más allá de todo esto
Te quiero explicar qué pasa más allá de todo esto, qué pasa más allá de lo que tu haces, qué pasa más allá de lo que tu dices, qué pasa más allá de lo que tu piensas, qué pasa más allá de lo que a ti te pasa, porque el más allá existe, y se dice de muchas maneras, y una de ellas es esta, más allá de ti y tus circunstancias pasa algo.
Mientras tu te pasas los días intentando solucionar tus problemas: la hipoteca, el trabajo, las vacaciones, el colegio de los niños, qué cenamos hoy, dónde cenamos hoy, mar o montaña, el niño se ha peleado con el vecino, la niña no hace ni caso…
Hay otras personas, que también tiene problemas y también intentan solucionarlos. Aunque sus problemas son totalmente diferentes a los nuestros: «¿Dónde duermo hoy?», y las alternativas no son, en el ático de gracia o en el de cualquier otro sitio, sino más bien, en este banco, o en el cajero «si me lo dejan abierto». «¿Dónde comemos hoy?», y nuevamente las alternativas son un poco más distantes de nuestra realidad, las suyas son o en el comedor de las calcutas, o en el comedor social de meridiana. «¿Qué harán los niños hoy?», insisto, las alternativas, no son ir a inglés o equitación, sino totalmente otras, «me molestarán o me dejarán tranquilo»
Nos hartamos de leer frases hermosas de Paulo Coelho, y de lo maravillosa que es la vida, y no nos damos cuenta que otros reflejarían mejor su vida con frases de Kafka, y no son capaces de ver la vida tan maravillosamente como nosotros. No tienen tiempo de evolucionar como personas, porque tienen que sobrevivir en mirad de una selva, de una gran ciudad, que no ha sido pensada para ellos, en la que ellos son un problema sin solución del que nadie se quiere responsabilizar, a no ser, en muchos casos para sacar tajada de ayudas administrativas.
Huimos, nos hemos hecho tan individualistas, nos hemos refugiado en nosotros mismos y en nuestras cosas, y nos hemos olvidado, que ellos son parte de mi problema, que los pobres son parte de mi problema, si señor, parte de mi problema. Los pobres no son una solución a mi problema, son mi problema. Los pobres no son aquellos a los que me acerco con un bocadillo, cuando estoy de bajón, o cuando me toca hacer la buena obra del día, ellos no son instrumentos, ellos son parte de mi problema. Ellos son sujetos de pensamientos, y sentimientos. Ellos tienen un alma. Ellos ven y oyen. Como tu y como yo. Sin embargo, no son libres como tu y como yo, no tienen al opción de escoger.
Los pobres son parte de mi problema, tengo que buscar una solución. Tengo que plantearme qué voy a hacer por ellos. Pero nuestra mente piensa que es más importante irme de vacaciones este verano, que ayudar a un hermano necesitado, que darle de comer, que buscarle un trabajo, que prepararlo para que pueda buscar ese trabajo. Es más importante eso que lo otros. Claro que te puedes ir de vacaciones, pero no nos vayamos con deberes pendientes, no lo dejemos para septiembre. Solucionemos, o por lo menos ayudemos a solucionar parte de este problema.
Desde la asociación de San José hemos hecho diversas llamadas de socorro pidiendo ayuda para seguir adelante en este verano, han llegado algunas ayudas, pero no las suficientes. Necesitamos un poco más. Quizá puedes hacer un único donativo, o quizá puedes hacer una donación periódica cada mes. En tus manos lo dejo, pero te pido que este verano no te vayas de vacaciones sin haber hecho tus deberes. Ayuda a tus pobres. Ellos pueden salvarte mañana la vida a ti. Porque el mundo da muchas vueltas, y los que hoy están arriba mañana pueden estar abajo.
Muchas gracias, y vivamos ayudando a otros a vivir, porque solo el que pierda su vida la ganará. y el que quiera ganarla la perderá.
Jóvenes de San José.
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