La consagración mariana
Al abordar el tema de la consagración o entrega total a María, tocamos el núcleo más delicado y entrañable de la verdadera devoción a la Virgen. Para no pocos, la consagración se reduce a rezar una formula, y no pasan de ahí. Cometen, evidentemente un error, porque consagrarse a María equivale a renovar las promesas bautismales que tienen carácter vitalicio e irreversibles. Consagrarse a nuestra Señora con entrega total es sumamente importante si queremos vivir a fondo la devoción mariana con todas las consecuencias que lleva consigo.