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Le transcribimos a continuación la noticia que ningún abortista querría escuchar nunca. La pregunta es ¿Porqué esta noticia no saldrá en ningún periódico?

Es una lastima pero esta noticia ya se ha dado: El embrión humano es una persona. Y la noticia la llevan dando desde hace mucho tiempo. Nosotros ya lo sabíamos, pero ellos parece que no lo quieren entender, cuando abortan, MATÁN a un ALGUIEN PERSONAL.

Mañana o algún día los principales periódicos podrían publicar esta noticia:

Julián Marías declara que el aborto es un crimen

«A veces se usa una expresión de refinada hipocresía para denominar el aborto provocado; se dice que es la <<interrupción del embarazo>>. Los partidarios de la pena de muerte tienen resueltas sus dificultades: ¿para qué hablar de tal pena, de tal muerte? La horca o el garrote pueden llamarse <<interrupción de la respiración>> (y con un par de minutos basta); ya no hay problema. Cuando se provoca el aborto o se ahorca no se interrumpe el embarazo o la respiración; en ambos casos se mata a alguien»

Podrían haber dado la noticia en toda la prensa internacional en el año 1984 cuando el Dr. Nathanson publicó «El grito silencioso»,, el titular quizá podría haber sido este:

«El Rey del aborto» se arrepiente, tras apostar una serie inmensa de pruebas

«Vio las cintas conmigo («El grito silencioso), quedó tan afectado que ya nunca más volvió a realizar un aborto. Las cintas eran asombrosas, aunque no de muy buena calidad. Seleccioné la mejor y empecé a proyectarla en mis encuentros provida por todo el país».

En el 2001 la prensa católica se hizo eco de un caso muy emotivo, un médico brasileño, que tras la muerte de su hija se dió cuenta de lo que realmente era el aborto, el mundo no dio entonces la noticia, podría haber sido esta:

Médico abortista brasileño se convierte tras muerte de su hija

«Al lado del lecho de muerte de mi hija, vi las lágrimas de todos esos angelitos que yo maté. Mientras ella esperaba la muerte, yo agonizaba junto a ella. Fueron seis días de sufrimiento para que en el spétimo día ella partiese hacia el encuentro con su hijo, al cual un médico asesino le impidió nacer»

No tuvieron suficiente con estos titulares. Tampoco les pareció suficientemente importante el siguiente titular:

Jérôme Lejeune, el famoso científico, relaciona aborto y eutanasia

«Estos hechos atroces muestran que no es una cosa imaginaria el argumento según el cual una ley que permite abortar niños enfermos conduce directamente a la eutanasia indirecta. Es, por desgracia, la descripción de un hecho»

Cualquiera de estos titulares deberían figurar en primeras páginas de periódicos, deberían estar en tertulias de radio, en tertulias de televisión, se debería de hablar de ello en los bares, restaurantes, las revistas femeninas deberían dar este contenido a sus lectoras en primeras páginas, podrían pensar, pues es verdad, los que saben, los que entiendes, los científicos, o por lo menos muchos científicos, aceptan que el aborto es un crimen, pues el feto es una persona, sin embargo este titular nunca saldrá en la prensa porque no interesa, porque no quieren oírlo. Esto es lo que un abortista nunca querrá reconocer: una persona en el feto.