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«Están lanzando una guerra contra los cristianos, en todas las partes del mundo, en Libia, así como contra el Vaticano y tenemos que encontrar un interés común en la lucha contra estos fanáticos, pero hay que hacerlo ahora, antes de que sean demasiado poderosos.» Son las palabras de Noman Benotman, de Libia, un ex yihadista y actualmente presidente de la Fundación Quilliam, una asociación británica que contrasta y estudia los procesos de radicalización del mundo islámico.

Nos reunimos con él en la mesa redonda «Libia y el futuro de la seguridad en el Mediterráneo», que se celebró ayer en Roma, organizada por el Comité Atlántico italiana (en colaboración con Abhath e Mediterranean-Gulf Forum). Libia es el tema prioritario de la política exterior italiana, sobre todo desde que se incrementó dramáticamente el desembarco de inmigrantes ilegales. Entre los representantes de nuestro mundo político fueron invitados a hablar en la mesa redonda de Roma, el subsecretario de Relaciones Exteriores Benedetto Della Vedova y el Sr. Cicchitto (Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara), muchos invitados árabes entre ellos el ex mediador para Naciones Unidas en Libia, Abdul Ilah Khatib, Mohammed Dahlan, uno de los más famoso líder de Al Fatah, Mohammed el Orabi, diplomático egipcio y ex ministro de Relaciones Exteriores. Noman Benotman, con su pasado, ha dado un tono particularmente fuerte y combativo en su discurso. Y es el único que ha visto desde el interior como nacía y crecía la violencia de los nuevos totalitarismos.

Opositor de Gadafi desde su tierna edad y exiliado político, comenzó su «carrera» en Afganistán, para luchar contra los soviéticos. Después de un largo período en el Grupo de Combate Islámico, movimiento de oposición armada al dictador libio, ha cambiado de vida a raíz del 11 de septiembre de 2001. Asimismo, en la conferencia del Comité Atlántico subraya repetidamente la diferencia entre la vieja y la nueva generación del terrorismo. La nueva generación, en primer lugar, no tiene un territorio fijo, no tiene objetivos políticos y no conoce fronteras. «Una orden sale de Waziristán (norte de Pakistán) y una persona se sacrifica en París», nos dice a modo de ejemplo. Pero sobretodo han cambiado los objetivo:No hay una estrategia para lograr objetivos políticos, sino la de una guerra destinada a matar cristianos y occidentales. Una guerra que va hacia adelante para lograr el exterminio. Cuando se habla de la guerra contra los cristianos, no debemos pensar en objetivos individuales. «El problema de este nuevo conflicto es que cualquier cristiano, cualquier símbolo cristiano es un objetivo potencial. Es una guerra religiosa. También se aplica a los árabes: es suficiente con ver cómo fueron cruelmente sacrificados los cristianos coptos o incluso africanos, como, por ejemplo, los cristianos etíopes. El video, en ambos casos, concluyó con la misma intención: ‘conquistaremos Roma. ¿Por qué Roma? Por el Vaticano, por el cristianismo, no por otras razones «

En Italia se habla de Libia sobre todo cuando se piensa en la inmigración ilegal. ¿Hay un riesgo de infiltración terrorista en la inmigración ilegal? Algunos dicen que sí, pero los expertos de inteligencia siempre dicen que no, si realmente tienen que venir, los terroristas, no se arriesgan a naufragar en el Mediterráneo. Benotman en cambio dice que está convencido de que esta infiltración «ya ha comenzado. Creo, firmemente, sinceramente, que vuestros servicios de inteligencia están al tanto de los personajes que dirigen el tráfico de inmigrantes ilegales procedentes de Libia. Es muy fácil infiltrar terroristas entre los inmigrantes, ya que la parte de Libia desde la que parten los inmigrantes ilegales está controlada por las milicias terroristas y para ellos es una fuente de autofinanciación «.

La primera cosa a hacer es «Cesar de reconocer las milicias yihadistas, como la de los Hermanos Musulmanes y dar pleno apoyo al gobierno legítimo y electo, sin lugar a dudas y sin ambigüedades». Un futuro movimiento sería bloquear la exportación de petróleo de Libia y la destrucción de los campos de petróleo, como ya se puede ver en las imágenes de la propaganda de ISIS. «Se están preparando para hacerlo – dice Benotman – ahora aún no están listos y en áreas como Derna (este de Libia) se enfrentan obstáculos demasiado fuertes, como las milicias de Al Qaeda, que son sus rivales. Y también a la población local, los nacionalistas locales y las tribus locales, que no quieren unirse a su postura».

Desde el punto de vista de Benotman, es imposible distinguir realmente entre los Hermanos Musulmanes, los yihadistas de Al Qaeda y el ISIS. «Ellos tienen la misma ideología y los mismos métodos. Mira lo que hace Hamas en Gaza, por ejemplo. Olvídate por un momento del conflicto con Israel, es una pregunta diferente: si nos fijamos en cómo Hamas (movimiento cercano a los Hermanos Musulmanes) controla el territorio en Gaza y lucha contra grupos rivales, vemos que lanza la gente de los edificios, mata en público, arrastran los cuerpos por las calles, al igual que ISIS en los territorios que controla. Todos buscan el establecimiento de un estado islámico a través de la violencia. Sería un error cosiderar «moderado» a los Hermanos Musulmanes, ya que son los progenitores de todos los otros grupos radicales, tienen una historia hecha de asesinatos políticos y de terrorismo, y sólo recientemente han sido lo suficientemente inteligente como para hacerse a un lado y optar por una estrategia de conquista democrática del poder. Pero su violencia proviene del Estado, y no de grupos terroristas, pero en todas partes pretenden tomar el poder «.

Pero ¿cuál es la relación entre el Islam y el islamismo,? «El Islam es una religión como cualquier otra, con un billón y medio de fieles. Yo mismo soy musulmán. El error que a menudo hacen los europeos es asimilar el islamismo, que es la ideología de los Hermanos Musulmanes, a todo el Islam. Y, por lo tanto, se escucha las peticiones de los islamistas, pensando que se esta escuchando la sensibilidad de todos los musulmanes. Pero la ideología es la ideología, es artificial, sólo indirectamente se ha relacionado con la religión. Europa está compuesta por países muy liberales, cada uno tiene sus derechos garantizados y su espacio, pero no se debe cometer el error de tratar con los Hermanos Musulmana y con grupos islámicos radicales, como si representaran las creencias del Islam. Un ejemplo de resistencia podría ser boicotear los eventos en los que participen representantes de estos grupos totalitarios. Nadie les prohíbe creer en lo que quieran, pero los representantes oficiales de Italia, por lo menos, ya que los representantes oficiales de un país democrático, no puede permitirse el lujo de aparecer cerca de ellos, no lo pueden legitimar políticamente». Pero, ¿cómo distinguir la ideología islamista del Islam? «La ideología islamista es el Islam armado, que quiere imponer su estado y cambiar el mundo. Se puede comparar, históricamente, la variante leninista del marxismo. Aquí tenemos grupos que creen que son la vanguardia del Islam, que toman órdenes directamente de Dios, y para cambiar el mundo por la fuerza de las armas, así como los marxistas leninistas se creen la vanguardia del proletariado. Pero este es un totalitarismo aún peor, porque los islamistas creen que tienen a Dios de su lado. Marxistas leninistas, al menos, no creían en Dios y no creían en la vida después de la muerte. El nuevo totalitarismo está dispuestos a suicidarse con el fin de hacer una matanza, porque están convencidos de ir al cielo «.

Stefano Magni

Original: La Nuova Bussola Quotidiana

Traducido por: Jóvenes de San José